En resumen, los principios básicos de la economía circular pueden resumirse como:
Diseñar productos para que puedan circular.
Adoptar un conjunto de estrategias de R, utilizando la jerarquía de R: Rechazar, Reducir, Reutilizar, Reciclar, etc.
Centrarse en los residuos como recurso para crear valor y reducir el impacto humano en la naturaleza.
Adoptar un enfoque sistémico, que requiere el pensamiento y la colaboración del sistema.